Evita los cálculos renales y el colesterol malo con una especia que todos conocemos
Se trataría de una planta aromática única para aromatizar platos en innumerables recetas
02/09/2023 12:00h
¿Sabías que una planta que usas a menudo en la cocina puede tener beneficios increíbles para tu salud? Se trata de una hierba aromática que además de dar aroma a los platos, también puede prevenir y tratar dos problemas muy comunes.
Si en algún momento has sufrido un cólico a consecuencia de un cálculo renal, es muy probable que ya hayas descubierto lo tremendamente doloroso que puede llegar a ser. Pero lo cierto es que, además, puede acabar convirtiéndose en un problema serio al aumentar el riesgo de daño a los riñones o a la vejiga.
Algo similar ocurre con el colesterol malo (o LDL) alto o muy alto, puesto que incrementa el riesgo de acumulación de placas en las arterias. Esto, a su vez, aumenta las posibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares graves, como ataques cerebrovasculares o cardíacos.
Por suerte, existe una planta aromática ampliamente utilizada en nuestra cocina, que tendemos a usar para proporcionar sabor y aroma a platos de carne y guisos. Y que podría ser muy útil contra estos dos problemas de salud. ¿Cuál es y en qué consiste?
Esta es la planta aromática útil contra los cálculos renales y el colesterol malo alto
Los cálculos renales y el colesterol alto son dos condiciones que afectan a millones de personas en el mundo y que pueden tener graves consecuencias si no se controlan adecuadamente. Son depósitos duros de minerales y sales que se forman en los riñones o en las vías urinarias. Y que pueden causar dolor intenso, infecciones, obstrucción del flujo de orina y daño renal.
Mientras que el colesterol alto es un exceso de colesterol en la sangre que puede provocar la formación de placas de grasa en las arterias. Si se produce, aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, como infartos o accidentes cerebrovasculares.
Para ayudar contra estos dos problemas, el laurel puede convertirse en una opción natural única, ya que, como veremos a continuación, actúa como diurético y antiinflamatorio. Además, es útil para disminuir la acumulación de grasa en las arterias.
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¿Cuáles son los beneficios del laurel para prevenir y tratar los cálculos renales?
Hay que tener en cuenta que, en primer lugar, el laurel es diurético, lo que favorece la eliminación de líquidos y toxinas a través de la orina. Esto ayuda a limpiar los riñones y las vías urinarias, evitando así la formación o el crecimiento de los cálculos. Además, al aumentar el volumen de orina, se facilita la expulsión de los cálculos pequeños.
También es antiinflamatorio gracias a su contenido en sustancias como el eugenol y el cineol. Estas sustancias tienen un efecto antiinflamatorio sobre las vías urinarias, lo que alivia el dolor y la irritación causados por los cálculos.
Y proporciona cualidades antisépticas que pueden prevenir o tratar las infecciones urinarias asociadas a los cálculos renales. Gracias a sus propiedades, el laurel combate las bacterias y los hongos que pueden causar estas infecciones.
¿Y qué ocurre con el colesterol malo? ¿Por qué el laurel también es efectivo?
Lo cierto es que también destaca por su capacidad antioxidante, gracias a los flavonoides, los taninos y los terpenos que contiene. Estas sustancias son capaces de proteger a las células del organismo del daño oxidativo provocado por los radicales libres. De esta forma, el laurel puede contribuir a prevenir la formación de placas de ateroma que pueden obstruir el flujo sanguíneo y desencadenar problemas cardiovasculares.
Otra propiedad del laurel es su capacidad hipotensora, ya que actúa como un vasodilatador y un relajante sobre los vasos sanguíneos. De esta manera, favorece la circulación de la sangre y ayuda a regular la presión arterial. Algo que es especialmente relevante dado que la presión arterial elevada es un factor de riesgo para el colesterol alto y las enfermedades cardiovasculares.
¿Cómo tomar laurel para disfrutar de sus beneficios?
Una opción útil es preparar una infusión con hojas de laurel secas y agua hirviendo, dejándola reposar por unos 10 minutos y colarla. Esta infusión se puede tomar hasta tres veces al día después de las comidas.
Además, se puede añadir el laurel a los platos de carne, pescado, sopas, guisos o legumbres para darles sabor y aroma. También se puede utilizar el aceite esencial de laurel para condimentar los alimentos, pero se debe tener cuidado con su uso excesivo debido a su alta concentración.
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Otra forma de aprovechar los beneficios del laurel es aplicar una cataplasma de hojas machacadas sobre la zona lumbar o abdominal para aliviar el dolor causado por los cálculos renales. La cataplasma se debe cubrir con una gasa o un paño y dejar actuar durante unos 20 minutos.
Como vemos, el laurel puede ser una opción útil contra el colesterol malo y los cálculos renales. Pero hay que tener en cuenta que nunca puede ni debería sustituir cualquier otro tratamiento médico prescrito por un profesional de la salud.
En cualquier caso, se convierte en un remedio natural interesante. Siempre y cuando, claro está, no exista ninguna contraindicación que nos impida su consumo.